Queremos contribuir a proteger y salvaguardar el patrimonio humano y natural de la Amazonía Norte ecuatoriana impulsando el paradigma de la Ecología Integral, inspirado en la Encíclica Laudato Sì y desarrollando una alianza entre la Iglesia, la sociedad civil, las universidades y las instituciones públicas.
BENEFICIARIOS
150 familias mejoran su acceso al agua potable y otras 250 tienen mayor capacidad de autoproducción y venta de productos alimenticios. 40 jóvenes adquieren habilidades emprendedoras, 8 de los cuales inician su propia microempresa ecológica. 2500 jóvenes y representantes institucionales y eclesiásticos participan en cursos de formación y sensibilización sobre Ecología Integral. En total, el proyecto beneficia directamente a 4500 personas.
OBJETIVOS
1) Garantizar una vida digna a los pueblos originarios en materia de nutrición y saneamiento.
2) Promover una economía sostenible que respete el medio ambiente amazónico.
3) Difundir la adopción de la Ecología Integral en la sociedad y en las instituciones públicas y eclesiales.
TERRITORIO DE PROYECTO
El proyecto tiene una duración de 36 meses y se desarrolla en dos provincias de la Amazonía ecuatoriana: Napo y Sucumbíos, donde residen los grupos indígenas Kichwa, Waorani, Siona, Secoya, Cofán, Shuar y Awá. El territorio se caracteriza en gran medida por áreas rurales, con abundancia de agua y otros recursos naturales, pero existen valores críticos de pobreza, pocas acciones de protección ambiental y una tasa de deforestación de 2932 ha/año.
En Napo, el sistema de tratamiento de agua presenta varios problemas: solo el 10% de la población recibe agua potable y solo el 6,5% está conectado a una red de tratamiento de aguas residuales. Los pueblos indígenas obtienen agua principalmente de la lluvia para alimentarse, pero no siempre se trata adecuadamente. Además, debido al cambio climático, la frecuencia de las lluvias ha cambiado, los períodos secos aumentan y la población se ve obligada a utilizar fuentes de agua aún menos seguras, como las del río, muchas veces contaminadas por los metales pesados que liberan las empresas mineras. derrames de petróleo y coliformes fecales.
En Sucumbíos el 40,8% de la población se dedica a la agricultura, pero el intento de seguir una lógica comercial para incentivar la producción agrícola y la transición a un sistema de monocultivo intensivo ha llevado a una reducción de la fertilidad del suelo. Además, el 94% de la producción de cacao y café se vende a intermediarios que lo compran a precios muy bajos, y el 43% de las familias rurales vive en la pobreza extrema. Finalmente, se ignoran los productos tradicionales para el autoconsumo, contribuyendo a la reducción de la variedad y equilibrio de la dieta, repercutiendo en la desnutrición infantil.
DERECHOS DE LOS INDIGENAS
Fortalecimiento de la agricultura familiar
En cada una de las 14 comunidades beneficiarias se identifican familias promotoras de buenas prácticas agrícolas que participan en escuelas de campo sobre producción de compost, conservación de suelos, producción de frutas y hortalizas, agroecología y reforestación analoga. A su vez, en el vivero de Casa Bonuchelli y en viveros comunitarios se reproducen plantas comestibles y se fomentan huertos familiares para la producción de alimentos.
Autoconstrucción de sistemas de agua potable
Se propone construir, con la participación directa de los beneficiarios, 3 sistemas de captación, potabilización y distribución de agua de bajo costo, utilizando materiales disponibles localmente y de fácil mantenimiento. En las comunidades beneficiarias, las casas están equipadas con instalaciones sanitarias conectadas a un sistema de gestión de aguas residuales que puede reducir los riesgos higiénicos y ambientales.
ECONOMIA SOSTENIBLE
Apoyo a empresas innovadoras
El programa Aprende a Emprender nace con el objetivo de conciliar las necesidades económicas de los pueblos originarios, en especial de los jóvenes, y la protección y puesta en valor de los recursos naturales en los que viven estos mismos pueblos. El programa, que se lleva a cabo en la provincia de Napo, se desarrolla en tres fases, orientadas a generar procesos creativos dentro de un gran grupo de personas y comunidades con el fin de identificar un pequeño número de iniciativas innovadoras con un alto impacto económico y ambiental. que puede recibir financiación de hasta $ 8.000.
Mejorar el acceso a los mercados locales
En la provincia de Sucumbíos, las 100 familias involucradas en la formación agrícola sostenible hacen se organizan en una plataforma de comercialización asociativa para que los pequeños productores puedan aprovechar mejores precios y puedan distribuir los costos logísticos entre los socios. En cada comunidad se organizan reuniones informativas, visitas a otras organizaciones y se facilita la participación en ferias agropecuarias.
ECOLOGIA INTEGRAL
Campañas de sensibilización en las escuelas
El programa se lleva a cabo en 24 escuelas primarias y secundarias, con un total de 2500 jóvenes involucrados. Los temas tratados durante los seminarios a través de la educación no formal se centran en la conservación de bosques, la protección de ríos y fuentes de agua, la reducción y reciclaje de plásticos y el cambio climático. Los jóvenes también participan en visitas guiadas y acciones comunitarias para fortalecer el aprendizaje y comprometerse directamente en la mejora de su contexto de origen
Formación de líderes comunitarios
La concientización de las nuevas generaciones sobre los problemas ambientales existentes en su propio territorio va acompañada de un proceso de fortalecimiento de las comunidades indígenas y su voz ante los poderes públicos. En este sentido, se crean Escuelas de Liderazgo dirigidas a jóvenes, mujeres y religiosos en temas de gestión de organizaciones comunitarias, fortaleciendo conocimientos y habilidades en el ámbito ambiental, para lograr que los participantes adquieran herramientas teóricas y prácticas que contribuyan a una mejor gestión del territorio
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