de Damiano Francesco Restelli
Son dos meses que estamos en Ecuador. Somos dos chicos: Damiano, educador Italiano y Begoña, psicóloga española. Llegamos en tierra ecuatoriana a final de noviembre juntos a otros 15 voluntarios repartidos entre Tena (Oriente) y Quito (en la sierra). Nosotros estamos involucrados en un proyecto social en Santo Domingo de los Colorados en la provincia de Santo Domingo de los Tsachilas (grupo indígena que vive en este territorio desde hace siglos). Es una ciudad muy joven y en constante cambio: nació hace 100 años y todavía sigue creciendo llegando ahora a más de 400 mil habitantes. La gente empezó a establecerse aquí gracias a su clima que no es tan frío como la sierra ni tan caliente como la costa, la justa medida para vivir a gusto. El proyecto donde trabajamos se llama “Soñando por el Cambio”, nacido hace 8 años gracias al trabajo de los padres Josefinos del Murialdo y apoyado por la ONG “Engim Internazionale”. Aquí vienen niños y niñas entre los 7 y 17 años que viven en los barrios más pobres de la ciudad y cuyo nivel socioeconómico bajo afecta el crecimiento de los jóvenes: hay mucha droga, alcohol, pobreza y delincuencia; tantas que hacen crecer los niños con la idea que todo estos sea normal y que los problemas se resuelven pegando, que el dinero se consigue de forma ilegal y que él más duro y maleducado será el que manda y el que se merece más respeto.
En “Soñando por el Cambio” están matriculados 110 niños, de los cuales participan cada día unos 85; aquí ellos reciben el desayuno, clases por toda la mañana, almuerzo, talleres por la tarde (football, ecua-volley, equilibrismo, costura, hostelería, gimnasia, pintura, baloncesto, carpintería y baile) todos esto llevado adelante por profesores y voluntarios. Cada niño es un caso diverso, con su historia, situación, familia y entorno diferente. Por esto hay que tratar cada uno de manera diferente: más comprensivo con unos y más duro con otros. Cada uno tiene sus propias características, sus patologías y su pasado: la mayoría sufrió abusos, violencias, pasó pobreza y falta de comida como se puede notar fijándose un poco en el físico de los niños que demuestra esta escasez. Es normal escuchar como los padres los han pegado porque estaban borrachos, drogados o tan solo frustrados de no poder traer comida a casa o no tener dinero suficiente para vivir. Otras veces llegan a clase contando como tuvieron que pasar la noche por la calle ya que los padres no los dejaban entrar en casa porque estaban demasiado drogados o bebidos para dejarles pasar. Otros cuando ya tienen bastante confianza te cuentan los abusos que tuvieron que aguantar por parte de padres, padrastros, tíos o desconocidos. El abuso sexual es un tema muy fuerte en Ecuador, cada día se escucha de alguien que ha sido violada y es tan diario que parece casi normal. En el proyecto muchas niñas y también niños estuvieron abusados o violados por parte de sus parientes, cosa que va a crear muchos problemas psicológicos y sociales en estos pobres pequeños.
La mayoría de los 110 alumnos de la la escuela de “los Murialdos” vive en las cooperativas de “Cristovive”, “Nuevo Amanecer”, “Unión Cívica” y “Bellavista”: unos barrios, o mejor cooperativas de barrios, muy pobres económicamente pero muy ricos de naturaleza, niños (ya que cada familia tiene en media 5 hijos) y perros callejeros. Estos están situados en el margen de la ciudad al limitar de la selva. Aquí puedes ver casas hechas con palos de “caña guadua” y un telo, casas de estaño, pero también otras muy bonitas, sencillas con colores y flores en la ventana. Obviamente el sistema de alcantarillado está constituido por pequeños ríos al lado de la calle (carretera de tierra) que acaban en el río mayor que se lleva toda la basura. En estos barrios hay una sola carretera principal con alrededor canchas de ecua-volley, tiendas y muchos talleres. Desde la carretera principal salen muchos otros caminos de tierra que llevan a las casa y a la selva. Estas cooperativas son verdaderos pueblos a dentro de la ciudad: todos los niños cuando se les pregunta de dónde vienen contestan desde Cristovive o Nuevo Amanecer y no Santo Domingo.
Santo Domingo sigue en constante desarrollo, tan solo hace 100 años ha sido creada echando al margen los indios que vivían ahí desde hace siglos, los Tsachilas. Desde la mitad del 1900 ha empezado el gran desarrollo acogiendo a más de 400 mil personas. La popolación por la mayoría viene desde todo Ecuador, pero hay también una gran mezcla de gente sobre todo el sur América (Colombia, Venezuela, Perú). Esta mezcla es lo que hace la ciudad tan bonita, se escuchan varios dialectos, se ven rastros muy diferentes entre ellos y todas estas culturas hacen que haya una mentalidad más abierta en comparación a otros lugares de Ecuador como la sierra donde la gente es más reservada.
Escuchando los autóctonos es bastante peligroso moverse solo por la calle, aún más si eres extranjero como nosotros. Todos los días se escucha de robos y peleas; lamentablemente, como ya se ha dicho también son muy frecuentes las violaciones.
El machismo en Ecuador es otra historia, y más aún cuando hablamos de un barrio como Cristo Vive. La desigualdad que existe entre mujeres y hombres, entre niños y niñas se puede ver en cada palabra, en cada acto de los niños. Aquí es normal escuchar la palabra “maricón” unas cien veces al día, y el “juegas como una niña” otras doscientas. Las madres de los niños y niñas con los que trabajamos tienen más o menos unos veinte y pico años y cargan con la responsabilidad de los niños y de todas las tareas de la casa. Aquí se respira la idea de que sin marido e hijos tu vida no está completa. Pero la cosa no se queda allá, sino que una vez que encuentras marido tu vida gira en torno a sus tareas y las tuyas, lavar su ropa, cocinar su comida. Al escuchar las historias de los niños y niñas del proyecto te das cuenta de que la violencia de género es algo demasiado común acá. Maridos que llegan a casa borrachos y descargan su ira contra su mujer, como si se tratara de un saco de boxeo. Padrastros, tíos, hermanastros que se toman la libertad de abusar de las mujeres por el simple hecho de ser mujeres. Y no queda allá, mujeres muertas a manos de sus maridos en un ataque de celos.
Siempre escuchando los autóctonos hacia 4-5 años atrás la situación en estos barrios era aún más peligrosa, ahora hay un nuevo cuartel de la policía que vuelve todo mucho más seguro, por el día.
La primera vez que tuve que ir caminando en medio de estos barrios fue para llevar a una niña que estaba enferma a su casa (4 palos de caña guadua y un techo de tela). Estaba muy excitado pensando que por fin iba adentro del barrio, entrar en las realidades diarias de los niños del proyecto, ver a donde viven, como viven, juegan…la Cristovive a primera vista no me pareció tan peligrosa como me decían, me pareció un sitio muy pobre pero muy bonito (puede ser mi personal gusto por las cosas simples y por cómo la gente con poco dinero puede volver las cosas hermosas). A mí no me pasó nada de malo, nadie me molestó robó o insultó, puede haber sido suerte o también el simple hecho que la gente sabe que soy voluntario del proyecto “Soñando por el cambio” (proyecto que después de 8 años de vida ha conquistado mucha notoriedad y respeto ayudando a muchos niños y familias en dificultad). Mientras caminaba a mí alrededor había casas sencillas pero muy bonitas, algunas muy cutres pero otras elegantemente pobres, perros callejero en todos los lados peleando y comiendo basura del piso como empleado de limpieza del barrio. Muy lindo ha sido ver, mientras caminaba, las madres que lavaban la ropa con un balde y agua de color negro, que me saludaban llevando en la cara una sonrisa que hacía notar el estupor de ver un extranjero en la Cristovive. Aunque era por la mañana había muchísimos niños jugando por la calle con juegos construidos por basura y trozos de cosas que se encuentran por el piso de la carretera. Los niños que no están en la escuela y no están jugando están ayudando a sus padres en sus trabajos o buscando basura para el reciclaje, mucha gente vive de eso, dividiendo plástico y papel que encuentran en la calle y llevándolo a el centro de reciclaje pudiendo así llevarse a casa un poco de dinero. Todos estos niños si no van a escuela, como ya dicho, ayudan los padres con los oficios, los otros que por la semana están estudiando, en el fin de semana son mandados por las familias a vender cosas por la calle, en el centro donde hay el comercio. Ya desde los 8 años están vendiendo queso, encebollados, comidas varias, bebidas y limpiando zapatos.
El principal problema que se nota y se escucha es la pobreza, que lleva a escasez o falta de educación, modalidades de recaudar dinero con actos ilícitos como prostitución, robos, venta de drogas; abusos de alcohol y drogas (de la más económicas y peligrosas por el físico y cerebro). Un ejemplo es el pegamento, inhalado desde paquete de plástico por la calle, de día, así común como si fuera comer un bocadillo: una droga que te deja muy activo a corto plazo y que acaba dando un gran bajón que necesita más asunción de la sustancia que, si no satisfecha, vuelve a la persona muy brava e irascible. Otros ejemplos son la marihuana (tripi) cortada con muchas sustancias tóxicas para que pese y coloque más; y, aún más común es el alcohol, consumido por padres, abuelos y también niños que los lleva a una adición muy fuerte, constantemente borrachos acabando durmiendo en el suelo, o aún peor pegando parientes o hijos. Hablando con los niños en el proyecto, tanto con los mayores cuanto con los más pequeños ya saben que drogas hay por la calle y a cuanto estan: la primera semana que estaba en el proyecto me preguntaron “Profe usted fuma?” yo debiendo dar buen ejemplo les contesté “No, niños, no hace falta fumar, pagar por aire sucia, pagar por acercar tu muerte; la aire que respiramos está ya bastante sucia” y ellos me contestaron “No, nosotros le preguntamos si fumas drogas” y yo “No la droga no hace falta, el mundo ya es hermoso así, porque cambiar la realidad escondiéndose atrás de un placer de mentira y momentáneo?!” y ellos muy orgullosos “Ahhh profe nosotros no importa, fumamos crack, coca, creepi esto es lo rico…”. Este era un discurso con niños de 10 años, creo que tampoco hacen lo que dicen pero hablan de lo que escuchan en casa o por la calle a diario, y porque sabiendo estas cosas creen que les hace grandes y “chevere”. Lo que asusta es que hablan de las sustancias como si fuera una cosa de orgullo, como si antes o después van a probar estas experiencias porque así pueden ser aceptados por los demás. Aún más fuerte es que estos pequeños ya saben cómo se utilizan las drogas mientras yo a su edad todavía pensaba a los pokémon, todavía era un niño que vivía en su burbuja de jabón de felicidad y inocencia donde todo iba bien y donde el mundo era hermoso y nuevo. Esta infancia que yo tuve la suerte de experimentar, los niños del proyecto no saben tampoco que es y, claramente, esto influye en su conducta, en su manera de hablar, pensar, llevando alguna vez a patologías y problemas psíquicos como hiperactividad, déficit de atención, retrasos, ayudado también por el consumo de drogas o alcohol por parte de los padres mientras el hijo todavía estaba creciendo en la barriga de la madre. Muchos, nunca tuvieron o experimentaron afecto, entonces tampoco saben cómo demostrarlos, cosa que se nota en cómo se relacionan con los demás niños y profesores: a veces te abrazan y te dan tanto cariño y de repente te faltan de respeto o insultan. Entre ellos las cosas se ganan a peleas o con malas palabras, se pegan entre niños pequeños y grandes entre niñas y niños. Otros problemas que la situación lleva es la malnutrición: muchos de los que vienen a la escuela tienen problema de alimentación, son demasiado flacos, lo padres no tiene bastante dinero para asegurar dos comidas al día, la única segura que reciben a diario es el almuerzo y el refrigerio que les damos al proyecto.
Esta es la realidad de los niños del proyecto de “Soñando por el Cambio”, esta es la realidad de los niños de los barrios más pobres de Santo Domingo, esta es la realidad de los niños de los barrios pobres de cada ciudad del mundo.
Los felicito por esta maravillosa obra,como me puedo contactar con ustedes,desearia colaborar si ze me permite.MIl bendiciones